En la tarde de ayer se realizó la última reunión de la Plataforma en este curso. Se analizaron las situaciones de retroceso en el sector educativo ya en firme (unas nacionales, como la LOMCE o los universitarios que abandonan estudios por las subidas de tasas; otras de Aragón, como la estafa de verano a los interinos, los nuevos recortes y dificultades para las becas de comedor, o el nuevo incremento de horario lectivo).
También se valoró la dinámica de reuniones y acciones de protesta seguida en el curso que ahora termina. Se considera que las dos huelgas generales en Educación (14 de noviembre y 9 de mayo) fueron sendos éxitos y que es en esa línea de unidad y eficacia que se deben concentrar acciones de ese tipo, evitándose convocatorias parciales que trascienden poco y desgastan. Se valora que esa concentración y dosificación de las huelgas se debe combinar con una permanente actividad por cauces diveros mediante acciones de otro tipo, de convocatoria menos compleja o lesiva para la economía pero que contribuyen a que la sociedad sepa que no nos resignamos ni nos callamos mientras los problemas siguen y crecen. En esa línea, se ve muy adecuado que, en contra del mensaje oficial de que "aquí no pasa nada", los documentos administrativos de fin de curso (memorias de departamentos y de centro) dejen constancia de cómo las medidas adoptadas desde el Departamento de Educación han sido lesivas para la calidad educativa, concretando y repasando todos aquellos aspectos en que la práctica educativa ha sufrido alteración o merma. Y también se acuerda que, a través de este blog, se difundan las convocatorias de protestas que vayan surgiendo durante el verano.
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